viernes, 27 de mayo de 2011

Nana.

Star light, star bright; first star i see tonight, wish i may, wish i might, wish upon a star tonight...

Unica frase escrita en la contraportada del libro que tenia en mis manos. La lei un par de veces y me quede pensando con la sonrisa de quien no comprende lo que sucede, pero se encuentra bien.
  El ser humano trata de entenderlo todo siempre, pero yo creo que a veces es mejor dejarse llevar.

 Aquel dia, sali a la calle. Llovia. Una lluvia fina que empapaba hasta los huesos. Pero no me importaba, no habia venido a Londres a  buscar el sol. Llegue al bohemio y antiguo mercado de Portobelo road, en Notting Hill, mas que ligeramente mojada. Una calle llena de tiendas donde si lo que se vende es nuevo, no es normal. Ropa, cauadros y juguetes de segunda o tercera mano, que atraen cada dia a personas que buscan comprar algo mas que un recuerdo. Cosas que trasladan a decadas pasadas o que con tocarlas te trasladan al rincon donde solias jugar cuando eras un nino.

Pues alli, en el lugar donde una sola estanteria te puede entretener horas, decidi entrar por la lluvia en un estrecho local que me llamo la atencion. Era una curiosa libreria, donde libros viejos cubrian las pareces; los rincones e incluso el suelo. Se escuchaba una suave cancion en tono de blues y a pesar de que estaba llena, no se escuchaba una sola voz. El silencio dejaba paso a las historias y fantasia que flotaban en el ambiente.

Empece  a mirar los libros, y uno atrajo mi atencion: Nana, de Emile Zola; Era una encuadernacion antigua y de color rosa. Sin saber porque, lo cogi y lo mantuve en mi mano mientras comence a observar los lomos de sus companeros de estanteria.

Cuando ya me dolia el cuello de inclinar la cabeza para leer los titulos en vertical, ocurrio algo que cambio aquel instante. El silencio se rompio por una nina de no mas de 7 anos de edad que en su perfecto ingles le insistia a su madre, que no queria estar en aquel lugar. Aun asi, la madre decidio no hacer caso. La nina, comenzo a sacar y meter libros de la estanteria a mi lado, mientras hablaba jugando consigo misma.En ese momento, deje el libro de Nana que tenia en mis manos para alcanzar otro y me di cuenta que no era la unica a la que ese libro le habia llamado la atencion. La nina tiro del libro que yo acababa de dejar, subiendose a las puntillas de sus pies y se llevo consigo unos cuantos mas que calleron al suelo. Me miro con sus grandes ojos grises y azulados y me agache para recogerlos. Guardamos algunos libros, menos uno que se quedo en sus manos. Y en ese momento, su madre, algo enfadada tiro de ella para sacarla de la tienda. Ella, me brindo el libro que sujetaba y se fue.

Wish I may. Lei el titulo. Decidi comprarlo y salir a la calle. Habia dejado de llover y el sol intentaba hacerse un hueco entre las nubes. Y fue entonces cuando, sin poder olvidar el titulo de Nana, lei la contraportada del libro que sujetaba.

Esto me hizo ponerme a pensar en las cosas que nos suceden porque si. Podria preguntarme poraue entre en ese momento alli, podria intentar pensar porque cogi aquel libro titulado Nana que luego llamo la atencion de la nina.  Y podria buscar el poraue de aquella casualidad que dejo este libro en mis manos. Pero al fin y al cabo, nadie sabe porque ocurren estas cosas, nadie puede explicar la razon de la casualidad; de porque perdemos autobuses,  nos dejamos las llaves o nos chocamos con alguien sin querer. Puede que sean simples coincidencias, puede que no sea nada trascendental. Pero esos detalles van tejiendo nuestra vida minusculamente, nos hacen estar en un lugar en un momento oportuno o conocer a alguien que ha llegado a ese lugar inexplicablemente al mismo tiempo.

Por eso compre aquel libro. Destino o  casualidad. Casualidad o destino lo llevaron hasta mis manos y... yo, no voy a llevarles la contraria.





(Las faltas y la ausencia de la enie es causa de un teclado extranjero. Lo corregire ^^)

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